martes, 28 de septiembre de 2010

MUSA ENCARCELADA

Doliente prisionera del letargo
compañera de celda de mis versos,
mi tinta lleva un sabor amargo
y tu condena la sufren hasta mis huesos
.
Me duelen las sienes de buscarte
en el laberintico presidio de mis sentidos,
me sangran los ojos de llorarte
y mis dedos ansian tus latidos.
 
La grandeza de tu destello,
el magestuoso poder de tu esencia
son ahora , la soga de mi cuello
y en mis hojas, la abstinencia
.
No existe llanura tan arida
ni lugar tan sombrio
como la ausencia y la perdida
que sufre el corazon mio
.
Por las noches tus cadenas
arrastran mi cuerpo desconsolado
por las movedizas arenas
de mi camino desertico y helado.
 
Necesito tu terapeutica presencia,
tus instrumentos afinados,
tu bailarina cadencia
de tus ritmos acompasados.
 
Poseeme, atraviesame con tus filos,
que no quiero ser un automata sumiso
manejado por rutinarios hilos,
acercate, como siempre, sin previo aviso

2 comentarios:

  1. Ahi está, definitivamente atravezando el laberinto de los sentimientos, sacando de lo profundo, el mar de tu instintos...jamás llegará a ser autómata, quien vive la vida, desde la fuerza del ser, en búsqueda constante del por qué...

    Amigo de mi alma, eres enorme...

    Besos de complicidad

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  2. -Sin previo aviso se instala en el centro de la emoción "del de la izquierda" y se quedan tus poemas acurrucados en posición fetal. Un lujito leerte querido poeta.
    Un besón asíiiiiiiiiiiiii de grande

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